PAFMAN NUNCA FUE MEDIOCRE

Joaquín Cera vuelve a la carga con más retraso del esperado, pero a fin de cuentas, el héroe más tonto de logroño y su fiel Pafcat, un gato, detalle que él mismo a veces olvida y su querida sobrina Tina Tonas (llamada así en honor a su protuberante nariz, como podéis sospechar).
Ediciones B vuelve a cambiar de formato la colección, el proyecto de re-devolver al personaje no puede ser tachado de fracaso, de ninguna manera, pero sí es cierto que los editores hubieran soñado con mejores niveles de ventas.
Saliéndose de la tapa dura, la colección ahora apuesta por un formato más reducido tipo las antiguas bibliotecas blanco y negro, para abarcar más páginas y sin subir el precio. Apenas 12 euros por tantas páginas bien valdría para que los lectores dieran más oportunidades a este heredero brugueriano.
Más de una vez he comentado con mi amigo Chespiro que Cera y Ramis estaban llamados a recoger la fantástica antorcha de Francisco Ibáñez, Jan, Escobar y otras vacas sagradas. De los incipientes y jóvenes talentos que presentaban a sus personajes en revistas como Súper-Mortadelo, estos dos autores eran los más ácidos, unos hacedores de un humor absurdo que era una evolución de lo anterior sin llegar a ser una ruptura. No obstante, también he coincidido muchas veces con el inefable Chespiro en que Pafman, Sporty y cía, nacieron con mala estrella, en un momento donde el interés en el producto nacional decayó y hasta una vaca sagrada tan querida como Súper-López pasa más apuros de los necesarios para seguir atrayendo público.


Os explico esto porque mucha gente que leía el personaje en la década de los 90 suele mostrar interés, "Ah, pero... ¿todavía existe Pafman?". Sí hijos míos, sí, otra cosa es que en ciudades como Córdoba y otros circuitos más reducidos cueste encontrarlos. Y en ocasiones, hasta en grandes mercados, procurad encontradme una "Guía para el motero" de Cera y Ramis... y si estáis de buenas, regaladme el ejemplar, anda, que llevó ya muchas librerías pateadas en vano.
Por eso, cada ejemplar de Pafman debe ser saludado como una gran noticia. Viene a relación con nuestra anterior entrada, no se nace siendo un mito como Mortadelo, Superman o Tintín, por citaros un triunvirato muy carismático. Pero un personaje simpático como Pafman, bien dibujado y escrito por un gran autor, no del todo reconocido, sabe buscarse las castañas del fuego y seguir su andadura, tal vez sin grandes cifras de ventas, pero con toda la dignidad y el orgullo.
Entrando en materia, me sabe muy mal por Cera que haya tenido que recurrir al blanco y negro, nuestros bolsillos lo agradecen, pero sinceramente, especialmente en las escenas de batallas, tengo la sensación de que hay más caviar del que ya aparenta, que no es poco. El color siempre le ha venido muy bien a Pafman. La trama en esta ocasión se centra en la clásica translación de los personajes a un universo a lo Tokien, de una forma similar a como lo hizo entre otras, Futurama, con "El juego de Bender".
Furia riojana contra magia arcana. Lo cierto es que yo os recomiendo encarecidamente que hinquéis también el diente estas vacaciones a "Pafdark" y "1945", en mi humilde opinión los dos mejores números de la re-devuelta del personaje, aunque en verdad, cualquiera de los editados es lo suficientemente simpático y gracioso para ser devorado durante el período estival.
Y es que aunque ande en tierras mediocres, Pafman nunca lo fue. Si acaso tonto... pero mediocre no.

3 comentarios:

Easmo dijo...

¡Oigan! ¿Que desfachatez es esta de no comentar este pedazo de artículo? ¡Arrepiéntanse!

Gustingorriz dijo...

Por mi culpa, por mi culpa, por mi culpa

Otro genial cómic...el cual desconozco xD Ahora estoy con Loco Mundo

El Viejo dijo...

Que no es mala cosa tampoco. Grande Loco Mundo también.